Hace poco, en el último número de nuestro boletín de coaching despedimos el 2010 deseando que antes de abrir la puerta del nuevo año, se echara la vista atrás un momento para despedirlo y, con paso resuelto se pudiera entrar en este nuevo año que empieza, en la creencia y con la seguridad de que un peldaño mas para alcanzar el objetivo está cubierto, y que se ha acumulado aprendizaje suficiente para continuar el camino de crecimiento, el cambio permanente hacia una vida mejor y mas completa.
2010 ha sido un año turbulento a muchos niveles. Quizá menos de lo que realmente hemos creído, o han querido que creyéramos.De cualquier forma, no vamos a negar que la ola de pesimismo ha ido creciendo, y que en algún caso (esperemos que temporal) ha pasado a ser casi de desesperanza.
No es que os animemos a no ser realistas y no tener los pies en la tierra. Sería absurdo pintaros un mundo sin dificultades o deciros que basta con pensar que las cosas van a mejorar por el simple hecho de que creáis en ello a pies juntillas. Pero si queremos deciros que el cambio, vuestro cambio, es el que va a dar forma progresivamente, con mucho esfuerzo y mucho trabajo eso si, a un futuro mejor, más limpio, más justo, más humano. De manera que os deseamos que esa semilla del cambio que ha germinado en vosotros por el simple hecho de haber tomado la decisión de, por ejemplo, leer este blog, germine y se multiplique, se extienda y ocupe cada vez mas parcela. Con esfuerzo, con trabajo, pero con la absoluta certeza que no será en vano.
Por todo ello, y en una entrada tan especial, la última de este año, nos gustaría ofreceros nuestra versión de los famosos tres deseos, no ya concedidos por el genio de Aladino, sino los que vamos a poner en nuestro punto de mira particular como objetivos para este año. Quizá penséis que nosotros no vamos a poder con ellos, puesto que son deseos globales cuya definitiva resolución no depende ni de lejos de nuestra única intervención, pero como hemos escrito aquí en alguna otra ocasión, los grandes cambios se producen sumando los cambios pequeños de cada uno. Así que si el mensaje cala, nos queréis acompañar y cada uno pone de su parte en cambiar a nivel individual, gran parte del objetivo estará en vias de ser alcanzado. No desestimemos la fuerza de una hormiga cuando se junta con miles de su congéneres y atacan a la vez a, por ejemplo, un saltamontes, cientos de veces superior en peso y tamaño... Estos son nuestros tres deseos/objetivos para el año próximo:
1.- Superar el pesimismo transferido interesadamente que ha calado tan hondo en la sociedad, creyendo profundamente en nosotros mismos y en nuestras posibilidades, y dejar de esperar a que alguien o algo acuda y nos "salve". Acción. Actuar ya con fuerza y con trabajo sin esperar a que nadie tire de nosotros y contraatacar contra los propagadores del miedo contagiando nuestro mensaje al resto de nuestro entorno. Es el momento de actuar por nosotros mismos. Se acabó el esperar. Se acabó la sumisión al miedo. Tuvieron su oportunidad y no lo han hecho. Ya no los esperaremos.Tomemos el mando de nuestra propia vida.
2.- Buscar la ecología en toda manifestación de nosotros mismos y de nuestros intereses. Cuando seamos capaces de planificar pensando también en los demás y para los demás sin que nuestras decisiones perjudiquen o influyan negativamente en ellos, habremos dado un paso decisivo para nuestra libertad y, por ende, la de nuestro mundo. Demasiados cadáveres en el camino de esta sociedad marcada por el enriquecimiento a toda costa, ajenos y propios. Liberémonos de nuestra propia esclavitud autoimpuesta y no podrán hacer nada jamás contra nuestra libertad.
3.- Vivamos la vida desde la certeza que es una e irrepetible. Que perder un minuto en la inquina, en pensar en los errores, en el odio, en la venganza, en la pereza, en el chisme, en el recelo, en la autocomplacencia, en la autoflagelación..... y así cientos de acciones y emociones negativas, es un minuto que perdemos en disfrutar de los nuestros, de nosotros mismos, de las maravillas que nos da la tierra, de nuestra capacidad para sentir y experimentar, y un minuto , que jamás, jamás, jamás va a volver.
Estos son nuestros tres deseos. Nosotros vamos a trabajar en ellos individualmente. Estamos seguros que tu también.
Feliz año nuevo. Feliz cambio por y para siempre.
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